La historia del rock en éste país está llena de efímeros fulgores de gloria, que pasaron como un cometa. Por Valladolid parece que pasó uno de esos en los primeros 80, con los palentinos Chacal. Banda de hard rock que afortunadamente conservaba mucho de la vibración 70s en su música. Lo que los hacía distintos.
En 1983 editan en un mini-sello su "Historias de un Vagabundo", que ya sólo por la portada, vemos que no tiene mucho que ver con estéticas tachueleras. Eran un cuarteto liderado por Blas Hernández (voz solista, guitarra, teclados?), Luis Ramos (guitarra), Manolo Trujillo (bajo) y Modesto Santamaría (batería). Tuvieron su repercusión, sobretodo por su zona, aunque recuerdo verlos reflejados en revistas nacionales. Poco después se queda tan sólo Blas Hernández, remodelando toda la banda.
En 1986 saldrá sólo en cassette, "El Legado de Nostradamus". Dicen que mejor no hubiera salido, por su horrible sonido. Hay maquetas mucho mejor grabadas. Un tercero conceptual dedicado al Quijote nunca fue hecho. En 2013 hubo reunión y disco, "Mundo Feroz". Y en 2016 hasta un album-homenaje a Chacal. Así que del todo nunca fueron olvidados. Nos importa su primero, por su amplio abanico de influencias y alto nivel atemporal, que le ha valido superar la barrera del tiempo con facilidad.
"El Camino más Largo" comenzaba como unos Budgie a escape libre. Letras trabajadas (una constante) y guitarras de complicidad NWOBHM. Flanger de aroma prog con sintes a la par, era la intro de "Lamento". No andaban alejados de Asfalto en su propuesta, construyendo con elegancia y visión pomp, como unos primeros Magnum o Nightwing. Siguen los guiños sinfónicos en "La Canción del Vagabundo", que se puede emparentar con unos Bloque, por su solidez de base progresiva. Sonido contundente con teclados y guitarras a la par y desarrollos ambientales en cambio constante. Magia que no decae para "Éste Mundo". Olvidan el watio fácil y las tachuelas, norma sine quan non en 1983. Aquí se respira todavía libertad de movimientos, no encorsetados por modas del momento. Valentía demostrada. "Mentiroso" vuelve al riff estilo Tony Bourge, y hasta su construcción recuerda a los británicos Budgie, (que por ésas fechas también andaban sofisticando su estilo). Puede que en "Atrapado por la Envidia" sintieran la necesidad de hacer algo en la línea de Obús. Una pequeña concesión por entrar en tendencias del momento. Pero hasta en ése terreno demuestran clase.
La segunda cara vuelve a cercanías con Asfalto en "Dueño de tu Vida", con guitarras gemelas soleando en un finísimo hard rock 70s. "Demelza (Estas en mi Mente)" ratifica su amor por la anterior década, en un excelente corte de factura Deep Purple. Lo prog sigue latente a partes iguales, y "Hermano" es otra prueba de que Chacal tenía su corazón dividido entre dos amores. Eso precisamente les dió personalidad marcada (como a Ñu), pero los alejó de los circuitos metal de moda. Añádase su situación geográfica descentralizada. Terminan con "Mi Ciudad", en otra adaptación "asfaltalizada" del estilo Chacal. Muy probable que ambas bandas tuvieran influencias comunes."Historias de un Vagabundo" tiene un símil con "En el Mundo de los Sueños" de Isthar. Bandas que en los 80 adaptaron el hard rock a su legado prog 70s. Como éste, es un disco buscado y valorado (150 a 200 €), y dudo que exista ni siquiera en cd. Recomiendo su atenta escucha. No ha perdido vigencia para nada.
J.J. IGLESIAS