Revista "Vibraciones" # 18, Marzo - 1976. Algunos extractos de la reseña sobre el álbum Queen : "A Night at the Opera" : "......Y Deacon se las ve y se las desea para poner las bases de bajo eléctrico a las paridas sinfónico - bostezantes de las otras reinas". "....Te pegan un corte a base de pachangada, estilo cabaret, como "Love of my Life", que te quedas seco". "La famosa "Bohemian Rhapsody" merece el primer premio a la floritura clásico - rockera más irritante del año". Ustedes dirán. Con éste panorama de la "sesuda" crítica nacional, me alegro de que no se editara, (al menos que yo sepa), el único disco de Spiders From Mars. Porque el remangue del critico (im) pertinente, (del que no tengo reparos en decir su nombre si alguien lo solicita), hubiera sido fino filipino. Pasa como con The Doors sin Jim Morrison. Que nadie quiere oír hablar de esos discos (a mí son los que más me gustan).
Pero con la salvedad de que SFM hicieron un cambio de estilo total que nadie percibió, por el encenegue del personal con lo de, "es que esto no suena a Bowie". Cuando el de la mirada bicolor se cansó de hacer el Fofito con lo de Ziggy Stardust, (conste que lo hizo muy bien), para pasar a la siguiente moda, sus miembros se tuvieron que buscar la vida. Y sin Mick Ronson también, el futuro estaba peliagudo. Así que a los supervivientes, el bajista Trevor Bolder y el batería Woody Woodmansey, no se les ocurrió otra que llamar a la nueva aventura, Spiders From Mars. Que es como si yo me pongo un bar dedicado al AOR, y lo llamo "Chavela Vargas". Me pedirán música de la venerable ancianita y venderé mucho aguardiente, pero AOR, poquico. Éste único album de SFM, que descubrí no hace mucho, es uno de los mejores artefactos pomp / early AOR (1976 : AÑO I), que se hicieran en Inglaterra. En una lista british de 10 nombres, debe estar sí o sí. La elección de los músicos fue astuta y de perro viejo. Dave Black (guitarras), venía de liderar a los prog - pomp desconocidos, Kestrel. Con un huérfano homónimo disco extraordinario en 1974, una maravilla absoluta, que hoy es Grial de coleccionista. En mis investigaciones, se habla de que el cantante, Pete McDonald, también procedía de Kestrel. De ser así, no grabó el disco. Lo que sí puedo asegurar es una portentosa voz entre Paul Rodgers y Steve Overland, por ahí van sus tiros vocales.
El teclista, - no oficial en el line-up, pero altamente destacable en el mismo -, fue Mike Garson. Jazzmen que procedía del "Aladdin Sane - Tour", a insistencia del propio Bowie. Pieza clave. La producción corrió a cargo de otro as, Dennis McKay, y supo dotarles de un nuevo modelo sonoro en éstas artes. Algo que ya se deja notar en la MUY Boston, "Red Eyes". El mezclaje suena ya a FM radio, en uno de los primeros discos británicos del género per se. Bad Company mirando a USA? Pues esa parece la estrategia, la verdad. El ritmo aplasta, el piano rockea y la guitarra es absolutamente killer. Esto es midwest pomp Premium, bro. "Shine a Light" sigue en ésa tesitura que tanto nos gusta por aquí, cercana a los primeros REO Speedwagon, Duke Jupiter, Silver Condor o Nantucket. Tremendo Bolder, la flamigera hacha de Black y el reinante Fender Rhodes de Garson. Todos brillan como Arañas de Marte. Cierto aire del Queen "pachanguero estilo cabaret", tenemos en "White Man Black Man", de particular aroma a charleston viejuno. "Fallen Star" podría estar en cualquier disco de Wildlife por parecida estilística. Un pedazo de canción más acorde con las inacabables carreteras USA, que con los "bowierismos" glamourosos que todos esperaban."Prisoner" es una balada plena de teclas y con la superior voz de McDonald, con finísimas hierbas guitarreras enchufadas y acústicas.
La segunda parte nos trae más ecos Bad Company en " (I Don't Wanna Do No) Limbo", con corales "bostonianas" en el estribillo y Black a puro nervio, (cómo tocaba éste hombre), bajo un manto de Hammond. Head East hubiera hecho una buena versión de ésta. "Stranger to my Door" tiene una brisa jazzy que la lleva a la mecedora soft, pero con el suficiente pulso rocker para que recuerde a Colosseum II en su primer album, (Mike Starrs + Gary Moore). El grandioso resultado final, con mellotron en el climax, contiene pura MAGIA pomper pocas veces conseguida en las Islas Británicas. "Good Day America" deja claras las pretensiones, en otra efusiva rola hard FM de estupenda factura. "Rainbow" tiene un positivo efecto, entre Glenn Hughes calmado, y Michael Franks, jazz flavour de mucha clase, línea Maxus. Y "Can It Be For" cierra con una demostración de buen gusto en modo Ian Gillan Band cerca de "Clear Air Turbulence", hard jazz rock rítmico y una guitarra digna de los Landau, Lukather, Schon o Goudreau, bajo una coral mellotronica. No me canso de escucharla. Ni el disco entero, que me tiene loco.
Tras el absoluto desprecio y olvido a nivel mundial, (todo un boicot, no aparecen en ninguna "Enciclopedia del Hard Rock" conocida), Bolder sustituyó a Wetton en Uriah Heep. Woodmansey montaría U - Boat. Y Black y McDonald formarán Goldie. Parece que Trevor Bolder aprovechó material sobrante de SFM para posteriores trabajos de Uriah Heep. "Roller" de "Innocent Victim" (77), y "Save It" de "Fallen Angel" (78), venían firmadas por el tándem Bolder / McDonald. Otra prueba más de que ésta banda fue un filón sin explotar. El dichoso nombre, que los mató antes de despegar. Ése fue su único pecado....pero fue mortal.
J.J. IGLESIAS