A mí me parece un milagro que a día presente, tengamos un nuevo disco de los legendarios Agitation Free, y además con prácticamente la misma formación de 1973. Que éso sí que es difícil.
Esto es, Michael Hoenig (teclados, electronic percusión, ex-Tangerine Dream), Burghard Rausch (batería, electronic percusión), Gustl Lutjens (guitarra, voz) y el alma mater, Lutz Ulbrich (guitarra, efectos, banjo). Además de Daniel Cordes (bajo y sintetizador).
"Momentum" se asienta en su leyenda y la acrecienta fiel a sus raíces como pioneros kosmische & german psych. Un recitado en francés adentra la audición de "Nouveaux Song" (8'35). Ritmos orgánicos e "inorgánicos" en maraña ciberespacial. Y unas guitarras mutantes llenas de sensibilidad que planean por el vasto éter sonoro de su particular multiverso interior. Todo muy bien llevado por un atento bajista. Los teclados se fusionan con los mástiles, que surcan como Sputniks, en una actualización de gloriosas hazañas a la Steve Hillage. Siempre estuvo el jazz muy presente en Agitation Free, aquí es como si Jaco Pastorious estuviera en Gong.
También la étnica forma parte del legado de ésta longeva Agitación Libre. Y en "Levant" (7'53) se pone en práctica como en los viejos tiempos de "Malesch". Sonando entre una prog & psych anatolian band y el kosmische de nueva generación. Tampoco se me escapan esencias andalusí-flamencas de Imán Califato Independiente/Guadalquivir. Orbitando nuestra bola azul en plácida reflexión existencial. Alguien dirá que "es muy Ozric". Sólo que AF comenzaron en 1967.
"Nightwatch" (9'26) continúa ingrávida por el espacio infinito, en astuto minimalismo melódico con un bajo en piloto automático. Pronto entra una guitarra que encierra enigmático interrogatorio, y se hace con las riendas. Todo torna en un crimsoniano y desolador paisaje. Donde Robert Fripp se sentiría tan cómodo como en las rodillas de Toyah. Los teclados aportan y sugieren. Prefieren miradas cómplices a vacíos diálogos.
Un mecano rítmico nos trae "Lilac" (6'19), con guitarras cuasi-surf en dual compenetración solista. Como unos Quicksilver Messenger Service-tribute band en una colonia perdida de Marte. Las slide se elevan al hiperespacio y entran en insondables agujeros de gusano Gilmour/García/Hillage. Precioso viaje y buenas vistas.
Vuelve la exótica con "Momentum" (9'18), si bien Michael Hoenig se encarga de cibernetizarla y futurizarla, a pleno presente 2024. El eastern flavour es evidente, con recuerdos a Embryo o Guru Guru, llevados al cosmic rock de sónica actualizada. Voces como instrumentos, sintetizadores astrales y guitarras que planean en una paz retomada de hippiosas filosofías zen.
"Shibuya" (8'14) suena como el retorno de los Annunnaki reclamando lo que es suyo. La venida de los Antiguos Dioses pidiendo cuentas de lo que hemos estado haciendo en su ausencia....... El indio, mayormente. Que no el sumerio. Blues cósmico crepuscular con esencias de Peter Green, tocando a todo trapo en la Enterprise.
El cierre y final de trayecto lo trae "InDaJungi" (7'03), que es otra gozadera cósmico- tribal entre Shakti, Embryo con el Karnataka College of Percussion, Weather Report, King Crimson y Zakir Hussain.
"Momentum" te hace sentir como Matthew McConaughey detrás de la librería, atrapado en su cruce dimensional. Si has visto "Interstellar" lo comprenderás. Y si no a qué esperas, peli y disco son necesarios.
J.J. IGLESIAS