Considero a Georg Deuter, junto a Florian Fricke (Popol Vuh), los padres de lo que se llamaría "new age" una década después. Fue tras un viaje a Persia en 1970, cuando Deuter se decidió a grabar todas sus inquietudes mentales y creativas en su ciudad natal, Múnich. Desde el principio tuvo claro que iba a ser un "hombre orquesta", multiinstrumentista sin ayuda de nadie. Y así funcionó en vivo por el circuito de clubs alemanes, hasta ser fichado por Kuckuck Records.
"D" es totalmente diferente a su posterior estilo. En su debut todavía primaba la experimentación libre y la psicodelia de finales 60. Luego tomaría caminos mucho más refinados, sofisticados y de una delicadeza compositiva encomiable. Aquí sus momentos guitarreros pueden trasladarte a los primeros Pink Floyd sin problemas. Como ocurre en la inicial "Babylon" (14'55), dividida en cuatro partes. Hipnótico raga rock fruto de ondulantes sonidos de órgano, distorsiones eléctricas y collages de sonidos no musicales procesados por cinta. Kraut en karne viva.
"Der Turm/Fluchtpunkt" (4'28) apunta excelente percusión étnica, cubriendo como base los devaneos eléctricos, que huelen a improvisados, de un primerizo pero imaginativo Deuter.
Como el propio Florian Fricke, nuestro hombre experimentó un revival religioso, y convirtió su nombre en Chaitanya Hari Deuter. En la India encontró a su gurú, Bhagwan Shree Rajneesh. Estas fuertes convicciones filosóficas ya se reflejan en "Krishna Eating Fish and Chips" (10'00). Donde las influencias de la música hindú, sitar incluido, invaden toda la pieza. Las enseñanzas de Ravi Shankar formaban parte importante en la pseudo-cultura de la parroquia hippie en la época.
"Atlantis" (6'03) trata con éxito, de llevarte a lejanas y perdidas civilizaciones. Guitarras al revés, cintas manipuladas, buen uso de la tabla y efectos electrónicos conseguidos con muy poca tecnología. Está claro que Deuter se las apañaba muy bien para atrapar ambientes aprovechando cualquier cosa. Nada de sintetizadores. Eso era todavía un lujo. No le hacían falta, de todos modos, pues sale airoso a base de ingenio. "Electronic Meditation" de Tangerine Dream está construido de la misma hábil manera.
Finalizando "Gammastrahlen-Lamm" (4'58) puede recordar a un embrionario Schulze, por cómo plantea sus melodías naif y efectos.
"D" es un artefacto ideal para comprender cómo se gestó todo en los inicios de la kosmische. Desde la marginalidad más underground y falta de medios, haciendo uso de dos ingredientes principales: imaginación y espiritualidad.
Sus trabajos posteriores inciden más en el aspecto étnico, sin perder sus raíces y con más instrumentación. Su toque al sintetizador es finísimo y elegante. Lleno de buen gusto. Ninguno de sus discos decepciona. Y tratándose de un estilo que luego llamarían "World music" (qué músicas no son del mundo?!!!), esto es un grandioso logro.
P.D.- "La gente nos preguntaba, porqué hacéis space music? Y no había una simple respuesta. No había nada calculado detrás. Todavía no comprendo porqué lo hacíamos!!!" (PETER BAUMANN)
Temas
1. "Babylon: I. Andantino/II. Allegro 138 A/III. Andante/IV. Allegro 138 B" 14:55
2. "Der Turm/Fluchtpunkt" 4:28
3. "Krishna Eating Fish And Chips" 10:00
4. "Atlantis" 6:03
5. "Gammastrahlen-Lamm" 4:58
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