Hasta hace bien poco, creía que mi primer grupo prog español con el que me estrené en vivo eran Secta Sónica. Lo digo porque en una de mis "auto-hipnosis regresivas", recordé no hace mucho........ Al pasar por lo que antaño fue un solar, que mis padres me llevaron a ver a "unos tales Módulos", en las fiestas del barrio de Las Fuentes. Eran finales 70. Y a mí todo lo que oliera a Brincos, Bravos, nombres similares y 60s, no podía gustarme por ley, si era música de mis padres.
Recuerdo un sistema de luz y sonido espectacular. Un órgano y sintetizadores superiores, (en "Modulos 4" el Mellotron triunfó!), con una guitarra embelesante......Recuerdo vagamente a un grupo cojonudo. Y el primer zasca en música que me llevé , de los muchos que te llevas en el obligado período de aprendizaje. Ya debían estar en los últimos coletazos, así que no me extrañaría nada que la formación fueran los dos miembros originales, Pepe Robles (guitarra y voz) y Tomás Bohórquez (teclados). Además de "Chupi" De La Fuente (batería) y un tal J. L. Campuzano "Sherpa" (bajo y voz). Éste último pronto haría historia con Barón Rojo, claro. Pudiera ser incluso que fuera la gira de éste último y tremendo homónimo, que hicieran para un humilde sello marca acme. Después de haber sido estrellas de Hispavox durante toda la década de los 70 (comenzaron en Madrid, en 1969).
Módulos fueron unos Young Rascals-Vanilla Fudge/West Coast/ RPI a la española. Y además casi inventan el rock andaluz. Que lo rozaron de cerca. Con unas letras un tanto kitsch, pero innegable tirón comercial conseguido a base de muy buena música. Que eso si que es tener mérito grande en la España de aquellos días.
La selección de temas de mi cd (1992-Musivoz, ahora mismo más valorado que el vinilo original!), no coincide a cómo salieron en su día en el álbum . Pero me gusta más así y son los mismos. "Otoño en Cualquier Lugar" (7'26) podría estar en cualquiera de los primeros Uriah Heep. Tampoco andan lejos de los primeros Yes con Tony Kaye al órgano. Además de por sus corales y el imperante bajo a la Chris Squire. Sus cambios de intensidad y desarrollos son eufóricos, llegando al entusiasmo. El prog barroco italiano aparece en "Beatles" (3'48), muy poco ídem, a pesar de que éstos forman parte importante de la letra. Componen como auténticos maestros, no han perdido su sello característico a pesar de los cambios de personal, y se diría que es una banda renovada, con nuevas ideas. Su faceta mística-trascendente sale a relucir en "Cristo" (6'56), manifiesto prog del momento en la onda de Salamander, Indian Summer, Beggar's Opera, Cressida o Deep Purple. Dudo que salvo a los últimos, conocieran al resto. Pero esto es una jodida maravilla por la que Vertigo hubiera matado en los primeros 70.
El rollo Laurel Canyon (o America por aquellos días), se refleja en "Hello" (3'54), con un gancho y guitarra de Robles deliciosamente sentimental. "Cuando el Tren se Detuvo en la Estación" (4'52) conserva el aura bedsitter rock a la Cat Stevens, que tan bien aplicaba Módulos a su propio estilo. Sus canciones son perfectas. No pierden esencias prog en instrumentación e inmaculados arreglos. Una abstracta intro da pie a "2000 Años Tristes" (3'53), recordando sus inicios psicodélicos con el reinado melódico que los caracterizó siempre. Dignos seguidores de la escuela Procol Harum. La final "Pájaro Amigo" (5'19) vuelve al hippie rock Costa Oeste, que era otro de sus fuertes estilísticos. Realmente todo lo que Módulos abordaba lo resolvía con soltura y superioridad. Aquí andan en un corte no muy alejado de los argentinos Sui Generis, tanto en estructura como en inacabable fuente de recursos.
Particularmente es mi disco favorito de Módulos y el menos conocido. Sé que es un dictamen muy discutible. Porque sus cinco trabajos fueron realmente asombrosos y extraordinarios.
J.J. IGLESIAS