Recuerdo que hace años tenía prejuicios con los arreglos orquestales en los primeros discos de The Babys. Lo que hace descubrir cosas maravillosas, prematuramente. Aquella herencia del baroque - pop 60s tan bien aplicada al AOR 70s, era una de las marcas de identidad de los británicos. Curiosamente también de UFO, otra banda mágica de la cuadra Chrysalis.
Formados en 1973 por Mike Corby (guitarra rítmica y teclados, sí, "otro Paul Raymond"). Tony Brock, venía de los fabulosos Spontaneous Combustion, y posteriormente de Strider, era el batería y voces, a veces solista. Y el mánager y quinto miembro del grupo, Adrián Millar. Finalmente completarian con John Waite (voz solista y bajo) y Wally Stocker (guitarra líder). Las miras de The Babys fueron claras desde el principio: conquistar el mercado americano. Para ello concluyen en una audaz estrategia. Compran un equipo móvil de 25 pistas y se trasladan a Los Angeles. Eso es tenerlo claro. Poder grabar ellos mismos donde quieran, y cuando les apetezca. Aunque gracias al rápido contrato con Chrysalis, gozan desde el comienzo de todas las facilidades técnicas. Ron Nevison, (otro habitual de UFO y MSG), se encarga de sus producciones. "The Babys" y "Broken Heart", ambos en 1977, asombran los USA con su potente sensibilidad hard rock. Pero para "Head First" (1979) ha habido ruptura con su fundador Michael Corby, que aparece en algunos temas pero no en la foto. En su lugar John Sinclair (Uriah Heep), entre otros, cubrirán el hueco a los teclados. La verdad es que resulta un magnífico álbum de transición, cosa anormal en estos casos. Sustituyen a Corby con dos norteamericanos, el teclista Jonathan Cain y el bajista Ricky Phillips, (dándole más libertad de movimiento a Waite). Y mutando del anterior trío, en quinteto. De ésta guisa debutan en la nochevieja del 78 en el Whisky a Go Go, viendo que su potencial y confianza ha crecido en altos niveles. Dos brutales álbumes darán a luz en 1980, "Union Jacks" y "On the Edge", ambos con producción de Keith Olsen. Como un gesto premonitorio, sueltan toda la traca de golpe ese año, porque aquello se acababa.....
El primer corte de "On the Edge", "Turn and Walk Away", deja de manifiesto la mano de Cain en una composición segura y directa a las ondas. Waite está cómodo con ésta formación, y canta deliciosamente en su único estilo, que nadie ha podido imitar. "Sweet 17" reconstruye el hard rock AOR en la línea de unos Loverboy que tomarán el relevo ése mismo año. El power pop también los quiere, y lo dominan como nadie en "She's my Girl", sin envidiar a colosos del gremio como The Cars, Nick Gilder o Cheap Trick. En "Darker Side of Town" casí estás esperando la voz de Steve Perry, pero no nos adelantemos, (aunque te sabes sobradamente la historia). E incluso a Bad English ,(sí, ésa también te la sabes). Y "Rock'n'Roll is (Alive and Well)" nos lanza una andanada de melodía radiable y efusividad rocker sin alejarse de Eddie Money o Bob Seger. Venga, no seas vago, levantate y dale la vuelta al disco, que "Downtown" bien se merece la molestia. Hay que agradecer a Keith Olsen que no edulcorara en exceso el caramelo, porque esto suena con balls de toro, aún siendo un evidente producto FM. Otra lindeza en la línea de Todd Rundgren y sus utópicos chicos, sería "Postcard". Contiene esa alegre savia que supuraban las canciones del cambio de década.
"Too Far Gone" podría estar en aquel excepcional "Face to Face" de los australianos Angel City (o The Angels), que mezclaban con perfecta alquimia power pop, new wave, punk y hard rock de nueva cosecha. Esto va en el mismo palo. "Gonna be Somebody" la firmaría Bryan Adams bien a gusto (y más ahora !). Mientras que la final "Love Won't Wait" también me suena a Canadá, en liguilla Prism, Trooper, Harlequin o Private Lines. Éste fue el broche de oro de The Babys.
Dos percances facilitaron la desbandada. Una lesión de rodilla de John Waite producida por un fan asalvajizado, que obligó a cancelar la gira. Y la llamada que hace Journey a Jonathan Cain para ingresar en su familia. En ése 1980 habían abierto para ellos, y éstos se habían quedado con las dotes superiores del teclista.
John Waite triunfará en solitario. Brock y Stocker harán equipo como backing band de Rod Stewart. El batería también estará con Jimmy Barnes (que fue con quien lo vi), brevemente con Air Supply y unos Humble Pie de pega. Los dos reunirán de nuevo a The Babys en 2013, con dos nuevos miembros. Y en los 80 disfrutamos con Bad English, en lo más parecido que hubo al line-up de éste disco, con Waite - Phillips - Cain involucrados. Pero eso ya lo sabes. The Babys fueron unos astutos british que conquistaron USA con la táctica sutil del Caballo de Troya.......y muy buenos discos.
J.J. IGLESIAS