Hoy toca una de órgano. Instrumento esencial en la evolución electrónica. Usado con total normalidad en el presente y todavía con mucho que decir. Incluyendo sonidos que bien podrían ser de sintetizador.
The Blackbirds fue una banda pionera alemana, formada en 1965 como parte del movimiento beat. En 1968 editan "No Destination" y acorde con su título, se disuelven poco después. Pero en plena explosión del underground teutón, su líder Werner Breining (guitarra, violín, flauta, voz),reúne a una completa nueva formación. Primero se hacen llamar Blackbirds 2000, editando un single para Basf en 1970. Este sello rescinde su contrato por falta de ventas. Vuelven a ser Blackbirds, y junto a Peter Bely (teclados, voz), Wolfgang Bode (bajo, voz) y Charles Sikora (batería, voz), editarán el celebrado "Touch of Music" en 1971 para el label OPP (hogar también de los fabulosos Hairy Chapter). Será su trabajo más recordado (y buscado!) y el final de su carrera.
Comenzaba con "Präladium" (2'17) en forma de majestuosa marcha de corte clásico a la Trace / The Nice. Por supuesto con Hammond protagonista y bella rítmica de acompañamiento asegurado como refuerzo. "All You Need" (8'30) y su barroco envoltorio nos lleva al prog italiano de New Trolls. O al ambiente catedralicio de Focus. El equipo violín- órgano consigue resultados notables. Teclísticamente hablando, estamos ante un álbum de órgano a la Rick van der Linden o Keith Emerson con The Nice. Conny Plank no era todavía un ingeniero muy conocido, pero ya destacaba con una plasmación sonora excelente. No cabe duda que aprovechó el momento y lugar que le correspondía en todo ésto.
En "Return From the War" (7'08) añaden a su académico proceder, hard & psych cercano a los primeros Deep Purple. Y al fin escuchamos la guitarra de su líder. Curioso su poca relevancia hasta ése momento. Y eso que todo el material es de su entera autoría. Destaca aquí un efusivo bajo a la Chris Squire junto a una blackmoriana guitarra solista. Sus compatriotas Hell Preachers Inc serían una buena comparación.
La solemnidad continúa en la segunda cara con "Give me Freedom" (5'49), de aspecto trágico similar a Paternoster. "What is Free" (4'08) vuelve a un proceder parecido a Focus, con inclusión de flauta y arrebatos Hard Rock. El Hammond protagoniza momentos espectaculares, bien parapetado por ritmos de ingeniosa ejecución. La final "Come Back" (10'55) es puro Blackbirds. Esto es, con su majestuosa expresividad instrumental y voces armonizadas-equilibradas por omnipresente órgano a la Le Orme, Alphataurus o Triumvirat. Los solos de flauta y guitarra engrandecen un final psicoactivo.
"Touch of Music" es un álbum extraordinario. Que en su reedición para Long Hair Records (2006), venía con un bonus (el single de Basf?), "Let's Do it Together" (2'51) de sorprendente catadura garage-hard rock. Lástima que aquí acabara la carrera de Blackbirds. Poseían una alta cualificación para haber hecho felices en aquella década, a cualquier prog die-hard.
J.J. IGLESIAS