No es un nombre dentro del RPI (Rock Progresivo Italiano), que se corresponda discografía con su inmenso prestigio. Tan sólo dos álbumes de estudio en los 70. El hard rock psych de "Sirio 2222" (1970) y la masterpiece prog "YS" (1972). Seguramente todo debido a éste último, uno de los grandes discos progresivos italianos de la era dorada. Si hacemos caso a los datos existentes, no encontramos otro en estudio hasta el fallido "Cuma 2016 DC" (2016).Con dos miembros fundadores, pero sin Gianni Leone (sólo invitado). Teclista y alma mater de éste grupo, también conocido en solitario como Leo Nero. Que fue el que revitalizó el nombre de Balletto di Bronzo en los 90, con el recomendable live "TRYS" (1999). En 2021 aparece "Plays Beatles", seguramente no lo que estábamos esperando. Y al fin "Lemures", aparecido en éstos días, sería el verdadero sucesor de aquel colosal "YS". 50 años después.
Ivano Salvatori (bajo) y Riccardo Spilli (batería) apoyan al carismático Gianni Leone (voz solista, teclados). Nada de guitarra aquí. Para Leone, todo lo que hace ésta lo puede hacer él con su nutrido arsenal. Y lo demuestra.
"Lemures" es un concept-album que trata sobre el tiempo y el futuro. Muy apropiado, tratándose de una vuelta tras medio siglo. "Incubo E Succubo" (3'54) entra con la trascendencia apocalíptica necesaria y hasta obligada. Es la introducción perfecta para un mundo distópico.....éste? Suena como una bestia durmiente recién despierta tras siglos de letargo. Preparación adecuada para "Oceani Sconosciuti" (4'22), donde Leone se afana en presentar abismal dramatismo desde una elección sonora realmente inventiva. La rítmica es una explosión volcánica constante. Cantado en italiano, como debe ser, su voz se mantiene firme y rotunda, con fuerte querencia melódica. Pero son los omnipresentes teclados los que marcan el ambiente catastrófico y desolador. Como en "L' Emofago" (4'30), angustioso hard rock de crepitoso Hammond y mastodóntica sección de ritmo.
"Napoli Sotterranea" (6'35) presenta sintes agresivos y amenazantes en su comienzo. Realmente toda la obra transmite ésa sensación desasosegante. Deja sin aliento. Juraría que veo influencias de Led Zeppelin - "Phissical" era en ésta oscura pieza. La maquinaria rítmica enloquece y Gianni Leone tampoco se muestra muy cuerdo. Lo que le da ése aura de histerismo peligroso y psicótico olvidado en el insulso prog actual. Aquí hay búsqueda e inquietud innovadora por medio de ambientación tenebrosa, fatalista y genial. No baja ésa impresión en "L' Ombra Degli Dei" (8'19), donde la épica oscura adquiere visos cercanos al naufragio psicológico. Y me encanta.
El vórtice sonoro que maneja el trío convierte esto en una letal bomba de nuclear prog. "Labyrinthus" (8'58) suena a marcha imperial ofrecida a un faraón en majestuoso desfile por el Valle de los Reyes. A mitad entra en un bosque de abstracción, inusual en actuales producciones. Porque éste disco es valiente, arriesgado y orgulloso de su pasado. Lleno del esplendor clásico de antaño. La reflexión romántica de "Certezze Fragili" (7'30) posee cercanías con los UK de "Danger Money". Siempre visto desde un prisma personal italiano. Total armonía en nivel emocional y técnico, bombástica pero con sentimiento. Vuelta al abismo oscuro en "Deliquio Viola" (7'49), otra magnífica pasada de sinfonía teatral casi operística, con unos pletóricos vocales de su líder y toda la tragedia que ésta grandiosa música requiere.
Cerrando la conceptual obra tenemos"Il Vento Poi" (6'11), posiblemente donde la tensión se relaja, comunicando un sentimiento de esperanza más que bienvenido. Espectacular álbum, sorprendente y revelador. Digno sucesor de "YS", a pesar de ésos 50 años. "Lemures" deja las vueltas de PFM y BMS convertidas en meras anécdotas. Ya entre lo mejor del año.
J.J. IGLESIAS