Disco perteneciente al árbol genealógico de Atomic Rooster. Desde que Rod Roach perteneció a Andromeda y Ric Parnell a los propios Rooster.
Los principales compositores del único álbum de Horse, Adrian Hawkins (voz solista) y Rod Roach (guitarras), ya se conocían desde el colegio. En 1968 montan Horse y tras varios cambios, completan con Colin Standring (bajo) y Ric Parnell (batería). Tocan por Londres abriendo para David Bowie, Joe Cocker, Slade o Deep Purple. No cabe duda de que estaban en el sitio y tiempo adecuado. Pronto fichan para RCA, vista su alta reputación de directo. A la vez, ése mismo sello ficha a Comus. De ahí que la portada de Horse sea obra del "siniestro" Roger Wootton. Contiene toda su inequívoca línea artística.
Un disco fuerte, peligroso, oscuro y pionero del Occult Rock. No extraña su comparación con los primeros Black Widow. Y eso se nota en la ominosa "The Sacrifice" (6'16), reflejando el ambiente hippie - paranormal de moda en aquel tiempo. Hawkins, teatral y alumno influido por Arthur Brown en sus berreos infernales. Curioso cómo estás bandas del primer hard rock cuidaban la melodía al detalle. Algo muy descuidado en la actualidad. Ritmos apalizantes pero con astucia y guitarra heredada del cercano heavy psych. Fustigue aural despiadado y sado-maso. Un placer de los dioses. Y ya con ésa Wah Wah envenenada, el paraíso.
"See the People Creeping Round" (4'25) es psicodelia con desmesura de watios. Lo que, et voilá, se convierte en hard rock. Piensa en los primeros Purple y tendrás unos directos competidores, sin nada que envidiar, hermano.
Acustizan en "And i Have Loved You" (3'13), y hasta en plan romántico suenan malvados. Oscuros y góticos como los mismos Necromandus (protegidos de Tony Iommi). Preciosidad barrocka.
"Freedom Rider" (3'20) lleva el piano de Terry Raggett en otra galopada hard prog. De ésas que tanto influirán al joven Steve Harris. Los Olympic Studios entran en combustión nada espontánea.
Y en "Lost Control" (2'25) parecen los Amboy Dukes británicos. Saltan chispas de éste corcel salvaje. Heavy psych que relincha y cabalga a toda leche.
En la otra cara "To Greet the Sun" (4'08) parece un tema de John Entwistle y su negro humor. Lleva unos arreglos minuciosos, (ahora harían un álbum con los arreglos de éste corte!), sin perder fuerza ni un segundo.
"The Journey" (3'56) podría pasar por repertorio de Black Widow. Con la travesera invitada de Clem Adelman y un gancho Occult bien reluciente. Parnell parece Keith Moon en otro golpe de efecto más, (estamos ante uno de mis 20 favoritos hard prog, consulta mi lista en Rockliquias!).
El acid folk de "Heat of the Summer" (4'03) les sienta fenomenal. Para eso es un estilo al que le quedan muy bien los relatos de terror. Pliegues medievales en acústico cruzan electricidad a fogonazos en una nueva desbocada guitarrera final. Townshend estaría encantado.
"Gypsy Queen" (2-53) caldea como un Alice Cooper en Denmark Street. Y el hendrixiano solo completa el lote de calidad. Que redondea "Step Out of Line" (4'23) con claro hermanamiento sabbathico. Explosivo final.
Ric Parnell deja el grupo por Atomic Rooster y lo sustituye Steve Holley (luego en Wings y Elton John). A punto están de girar por USA y grabar un segundo álbum, pero no hay acuerdo con RCA y Horse desaparece. Roach y Hawkins, inseparables, forman Saturnalia y graban su único trabajo con parte de material del nunca editado segundo de Horse. No, el de Saturnalia NO ES DE 1969!!!! Casi me vuelvo loco con ésto! (Gracias, Alex Carretero!!!).
Y así quedó uno de los mejores y primeros hard rock álbumes británicos, en el limbo de los deseados. Ahora felizmente repescado por Guerssen.
No te lo pienses.
J.J. IGLESIAS