Hay casos en el mundo de la música que causan perplejidad pero que por otra parte son bastante comunes cuando las decisiones sobre qué camino tomar y en que estilo se hace no siempre acaban bien. La fortuna es una probabilidad matemática que se da cuando una serie de circunstancias encajan. El azar en todo en esta vida es imprevisible. Yo no he creído nunca en la buena o mala suerte y mucho menos en el destino porque pienso que la mayoría de las cosas negativas que nos ocurren en esta vida es culpa nuestra. Bien sea por malas o equivocadas decisiones o por formas determinadas de carácter personal. Acertar es difícil. Una probabilidad que depende siempre de factores que en un momento dado encajan. Nadie puede controlar eso pero la mayoría de las veces que algo sale mal casi siempre es por nuestra culpa o por nuestra estupidez innata como seres humanos. La suerte es algo muy relativo.
Muchas buenas ideas en la música se fueron al traste por malas decisiones. Sorprendería saber cuántos compositores, músicos y obras se encuentran en cajones polvorientos que nunca vieron la luz.
Esta banda alemana duró del 94 al 98. Se afiliaron al movimiento neo prog de esa década que la verdad sea dicha fue muy activa y provechosa. Salieron muy buenos trabajos de bandas progresivas y discos que a día de hoy ya son considerados clásicos del género léanse Anglagard, Flower Kings, Spocks Beard, IQ, Cyan, Collage, Isildurs Bane, After Crying y un largo etc. Sin embargo otros con capacidades similares e ideas interesantes pasaron de puntillas y no se enteró nadie.
Faun solo editaron este doble CD… y gracias. Un disco con música interesante y hasta original. Pero si trabajas en otras cosas de 9 de la mañana a 5 de la tarde para poder vivir y mantener una familia como les pasó a estos chicos resulta complicado mantener una ilusión artística salvo que la virgen del pilar se te aparezca. Como suele suceder cuando haces un tipo de música concreto tu vida se reduce a clubs minoritarios y pequeños festivales y eso que hablamos de Alemania donde la cultura musical es muy superior a la nuestra.
El 5 de enero de 1998 hicieron su concierto de despedida en su propio país e interpretaron todo el material completo que habían compuesto lo que dio para el doble CD que nos ocupa: “Wondrous End” que ya lo dice todo en su título. Un único trabajo y despedida de este estupendo sexteto multi-instrumentista. Es un trabajo muy largo de 146 mtos de duración, al menos el legado es lo suficientemente amplio para darnos cuenta del potencial que tenía esta gente en sus sofisticadas y detallistas composiciones. hay muchos temas largos de 10 a 12 mtos en un estilo rico que abarca todo lo que el rock progresivo nos viene argumentando desde los lejanos años 70. Múltiples influencias se dejan notar lógicamente. Hay mucha melodía, muchos momentos hermosos, emotivas interpretaciones y cierta originalidad en sus formas de composición. Necesitaras tiempo para apreciar este único trabajo, pero merecen la pena. Lástima de banda porque eran realmente buenos.
Alberto Torró