Es muy difícil o imposible obtener información de esta banda Norteamericana que apenas sí llegó a lanzar este álbum. Poco después dos de sus miembros morían en un accidente de coche dando al traste con el proyecto de manera definitiva.
Su música se caracteriza por ser una extraña mezcla de sonidos espaciales, teclados pesados, guitarras psicodélicas y ritmos soul, góspel, blues, garaje y pop.
El primer tema es abundante en voces de coros mayormente femeninos y una voz de hombre, profunda y serena que recuerda junto al clave que se escucha de fondo a los RARE BIRD de Gould y Kaffinetti. Después llegará el que para mí es sin duda su mejor creación. Un viaje al interior de la mente con una guitarra corrosiva destilando ácido y un pesado órgano a contratiempo en la onda BRAINTICKET que nos hechiza haciéndonos vibrar en una frecuencia hipnótica.
El último corte de la primera cara nos hace bajar de las nubes a base de sonido soul , góspel y blues invadido de ritmos pop de los 60.
El lado B vuelve a moverse en terrenos pop y soul con unas pizcas de psicodelia y unos ritmos alegres y despreocupados ajenos a la oscuridad de la primera cara. Adentrados ya encontramos un tema (Goodbye my darling) en el que el estribillo de la melodía principal entra en un carrusel que se repite y que poco a poco va creciendo en sonoridad. La música fluye del fondo psicodélico llevándonos a un estado de trance placentero.
Vinilo inusual que debido al conglomerado de estilos que contiene lo convierte en inclasificable.