Los madrileños Electric Fence van ya por su cuarta propuesta con "Iron Surgery". Y lo hacen con seguridad y actualizando hard rock de casta con autenticidad inusual. Que te los crees, vaya.
Jorge Coello (voz solista), Sergio Gabaldón (guitarra, coros), Luis Maldonado (batería, coros) y Edu Morales (bajo, coros). Por ése mismo orden, son "Gorjo", "Serch", "Tonono" y "Dudu". Que no son Pokemons, sino el alias de los Electric Fence. Lo que digo, auténticos.
Y así suenan a la primera de cambio en "The Devil's Game", como un mutante killer de AC/DC finales 70 y The Cult en su apogeo 80s. Descargan con la mala hostia necesaria y obligatoria para que el hard rock sea algo que se sienta peligroso. Y no ésa cosa inofensiva en que se fue convirtiendo con el tiempo.
"Sex, Beers, Rock'n'Roll" ya te lo cuenta mejor que yo. Con una frescura revitalizante que recuerda a los primeros Tesla. Voz solista imperiosa y coros que invitan al desmadre. Banda que juega en equipo con solvencia de campeones. Y la guitarra de "Serch" escupiendo notas bien puestas, con un breve impass psico que queda como con mucho gusto.
Ahora parecen Foghat en la esencial "Kill Your Masters". Le meten una coz macarra que siempre funciona y anima a apoyarse en la barra con una buena jarra fría. Son más que buenos en lo suyo, esto es, hacer himnos tabernarios para olvidarse del puto mundo. Si, como los de antes.
Se meten en piel de blues del Delta para introducir "Black Soul". Que pronto arremete vestida de psicodelismo duro y arreglos inesperados. No tan básicos como te crees. Slide pantanosa y clase rock blues excepcional. Valen igual para un roto que para un descosido. Y eso se agradece.
Como unos Bad Company de éste siglo atacan "Acid Mississippi", en actualizada influencia que funciona en su estilo como lubricante ideal para su máquina.
"The Island" gustará a seguidores asiduos de Rival Sons o The Answer. Y es que juegan en ésa liga. Todo buen gusto aquí.
Finalmente "Iron Surgery" (8'40) echa el resto, por si no había ya bastante buena mandanga en la fiesta. Y lo hacen con un tremendo y aplastante riff 70s/ hard blues a la Black Country Communion. Inclusive con su momento dark psych a la "Danzed & Confused", mostrando cartas de firma instrumental exquisita. Incluído un claro atisbo prog, quizá como portal profético para un futuro. Por destreza, pueden. Percusión invitada de Javier Planelles (Eldorado) y absoluta maravilla que debe ser escuchada con atención.
Electric Fence demuestra que se puede hacer sincero, original y completo hard rock, en un género muy vapuleado en los últimos tiempos por mediocres y oportunistas.
Ellos le dan la respetabilidad que se merece.
J.J. IGLESIAS